Aunque podría parecer el valle de Aramayona en el País Vasco, este pintoresco pueblo invernal en el valle de Inn, a 1.467 metros de altitud, es Ardez, una joya escondida en el este de Suiza, reconocida por sus profundas raíces culturales y su impresionante conservación histórica.
Este encantador pueblo, que protagoniza la imagen de hoy, refleja las ricas tradiciones y el idioma único de las comunidades de habla romanche en Suiza.
Sus casas están adornadas con esgrafiados y coloridos murales, dos estilos artísticos emblemáticos de la región de Engadina.